EEUU pone de nuevo en jaque a Venezuela y arriesga los acuerdos de Repsol

Estados Unidos ha vuelto a poner a Venezuela en su punto de mira. Washington está dispuesto a recuperar las sanciones sobre el país si su presidente, Nicolás Maduro, no garantiza unas elecciones libres, lo que supondría poner en riesgo la vuelta a la producción de Repsol en el país.

Washington ordenó esta semana la cancelación de todas las transacciones comerciales entre entidades estadounidenses y la minera estatal venezolana Minerven y advirtió que volvería a imponer en abril las sanciones energéticas que mantenía anteriormente si Maduro no se atiene al acuerdo firmado el año pasado para celebrar unas elecciones presidenciales justas.

Estados Unidos ha incrementado así su presión desde que el máximo tribunal del país confirmase la semana pasada una prohibición que impedía a la principal aspirante de la oposición, María Corina Machado, participar en las elecciones, tal y como recoge Reuters.

Estados Unidos impuso sanciones petroleras a Venezuela por primera vez en 2019, pero había concedido un alivio al país miembro de la OPEP en octubre en reconocimiento de este acuerdo electoral. Como resultado de dicha rebaja de las sanciones, Venezuela aspiraba a incrementar sus ingresos petroleros totales hasta 20.000 millones de dólares este año desde unos 12.000 millones de dólares en 2023.

Esta situación supondría también poner en riesgo el acuerdo firmado en diciembre por Repsol y PDVSA para la gestión de la sociedad mixta Petroquiriquire.

Según detallaron desde la compañía, este pacto asegura tanto la generación de fondos propios para la inversión necesaria como para la recuperación de la deuda histórica de Repsol ligada a estos activos. La española tiene una participación del 40% de acciones en Petroquiriquire, mientras que PDVSA maneja el 60% restante.

Fuentes del mercado aseguraron que el acuerdo no conlleva nuevas inversiones por parte de la española, pues su cometido es el aprovechamiento del recurso ya existente en estos campos. Las mismas fuentes estiman que la producción del proyecto podría duplicarse en dos años

Repsol se sumaba así al grupo de gigantes petroleros que habían firmado acuerdos con Venezuela como Chevron o la francesa Etablissements Maurel & Prom

Fuente: el economista es