Por qué está desapareciendo para siempre una parte importante de la historia de internet (y qué se está haciendo para evitarlo)

Para los historiadores del futuro, podría llegar a ser difícil entender plenamente cómo vivíamos nuestras vidas a principios del siglo XXI. Esto se debe a que se podría borrar la historia de cómo vivimos nuestras vidas digitalmente y a la falta de esfuerzos oficiales para archivar la información del mundo tal como se produce en estos días.

Internet desaparición
Millones de páginas de internet corren el riesgo de desaparecer

Gracias a los fragmentos de papiro, mosaicos y tablillas de cera que han sobrevivido, es posible saber qué desayunaban los pompeyanos hace 2.000 años.

Si entiendes suficiente latín medieval, puedes saber cuánto ganado se criaba en las granjas de Northumberland en la Inglaterra del siglo XI, gracias al Domesday Book, el documento más antiguo que se conserva en los Archivos Nacionales de Reino Unido. Y, a través de cartas y novelas, se puede conocer la vida social de la época victoriana.

Pero, para los historiadores del futuro, podría llegar a ser difícil entender plenamente cómo vivíamos nuestras vidas a principios del siglo XXI. Esto se debe a a que se podría borrar la historia de cómo vivimos nuestras vidas digitalmente y a la falta de esfuerzos oficiales para archivar la información del mundo tal como se produce en estos días.

Sin embargo, un grupo informal de organizaciones está haciendo frente a las fuerzas de la entropía digital, muchas de ellas operadas por voluntarios con poco apoyo institucional. Nada ejemplifica más la lucha por salvar la web que el Internet Archive, una organización estadounidense sin fines de lucro con sede en San Francisco, fundada en 1996 como un proyecto del pionero Brewster Kahle.

La organización está embarcada en lo que puede ser el proyecto de archivo digital más ambicioso de todos los tiempos: ha reunido 866.000 millones de páginas web, 44 millones de libros, 10,6 millones de videos de películas y programas de televisión y más.

Alojadas en un puñado de centros de datos repartidos por todo el mundo, las colecciones del Internet Archive y de unos pocos grupos similares son lo único que se interpone en el camino del olvido digital.

«Los riesgos son múltiples. No solo que la tecnología pueda fallar (eso sin duda sucede). Pero lo que es más importante, que las instituciones fallen o las empresas quiebren. Las organizaciones de noticias son absorbidas por otras organizaciones de noticias o, cada vez con más frecuencia, son cerradas», dice Mark Graham, director de la Wayback Machine, del Internet Archive, una herramienta que recopila y almacena instantáneas de sitios web para la posteridad.

Hay numerosos incentivos para poner contenido en línea, dice, pero hay poco que impulse a las empresas a mantenerlo a largo plazo.

Gracias a la evidencia física presevada podemos conocer, por ejemplo, detalles de la vida cotidiana de los pompeyanos hace 2.000 años

A pesar de los logros del Internet Archive hasta ahora, la organización y otras similares se enfrentan a amenazas financieras, desafíos técnicos, ciberataques y batallas legales de empresas a las que no les gusta la idea de tener copias de su propiedad intelectual disponibles gratuitamente.

Y como muestran recientes derrotas judiciales, el proyecto de salvar Internet podría ser tan fugaz como el contenido que intenta proteger.

«Cada vez más de nuestros esfuerzos intelectuales, más de nuestro entretenimiento, más de nuestras noticias y más de nuestras conversaciones existen solo en un entorno digital», dice Graham. «Ese entorno es intrínsecamente frágil

Fuente: el nacional